martes, 24 de agosto de 2010

Eslovaquia

Eslovaquia (en eslovaco Slovensko) o República Eslovaca (en eslovaco Slovenská republika), es una república centroeuropea que forma parte de la Unión Europea (UE). Limita al noroeste con la República Checa, al norte con Polonia, al este con Ucrania, al sur con Hungría y al suroeste con Austria.
Tiene una población de 5.389.180 habitantes y su capital es Bratislava con 425.155 habitantes. Los Montes Cárpatos ocupan toda la zona norte del país.
El final del comunismo en 1989 significó también el fin de Checoslovaquia como tal y la creación de dos estados sucesores; Eslovaquia y la República Checa separaron sus caminos el 1 de enero de 1993.

El territorio de la moderna Eslovaquia fue ocupado por los celtas alrededor del 450 a. C.; ellos construyeron poderosas Oppidums en Bratislava y Liptov. El más antiguo registro escrito de Eslovaquia son una serie de monedas de plata con los nombres de los reyes celtas. A partir del año 6 DC, el imperio romano estableció y mantuvo varios asentamientos sobre el Danubio. En la zona oeste y central de Eslovaquia entre el año 20 al 50 DC existió el reino bárbaro de Vannius, fundado por el pueblo germánico de los Cuados. Los pueblos eslavos se asentaron en el territorio de Eslovaquia en el siglo V. El oeste de Eslovaquia fue el centro del imperio del rey Samo durante el siglo VII. Después, en el siglo VIII, surge el Principado de Nitra, y su primer gobernante Pribina hizo consagrar en el 828 la primera iglesia cristiana en Eslovaquia. A partir del 833, junto con su vecino Moravia, el principado formó el núcleo del Imperio de la Gran Moravia. Su momento de mayor apogeo fue la llegada de los Santos Cirilo y Metodio en el 863, durante el reinado del Príncipe Rastislav, y la expansión territorial bajo el reinado del rey Svätopluk.
  
Eslovaquia posee varias características que la hacen un país atractivo desde el punto de vista del turismo. Posee numerosos centros de deportes de invierno, ciudades históricas, pintorescos castillos, cuevas, únicas iglesias de madera, parques nacionales y otras riquezas y paisajes naturales.
Aproximadamente el 40% de Eslovaquia está cubierto por bosques. Los bosques de Eslovaquia poseen una rica fauna, que incluye osos pardos, lobos, linces, zorros, jabalíes salvajes, conejos, ardillas, turones, castores y ratas almizcleras. En las zonas montañosas se pueden observar gamuzas y marmotas alpinas. Al ser una de las pocas zonas cuyo medio ambiente no fue dañado por el antiguo régimen comunista, Eslovaquia posee un altísimo porcentaje de parques nacionales y otras áreas protegidas.
Una de las principales atracciones de Eslovaquia son los Montes Tatras (que se dividen en los Altos Tatras y Bajos Tatras), que son la zona más elevada de los Cárpatos. Allí se pueden observar interesantes especies autóctonas de fauna y flora, además de ofrecer numerosas opciones para la práctica del esquí, caminatas por la montaña y escalada en roca.
Es muy popular la práctica de navegación en kayaks y canoas en los ríos y arroyos de Eslovaquia. También existe una larga tradición de uso de balsas, especialmente en el río Dunajec.





No hay comentarios:

Publicar un comentario